Lograr una planta de lavanda saludable y de mucho perfume
Si me preguntan cuál es mi planta favorita, realmente no sabria si quedarme con el jazmín, la lavanda o los cactus. La lavanda por su perfume, el jazmín a demás por su hermosa flor, y los cactus por que los tengo por toda mi oficina y me alegran el ambiente laboral.
Pero vamos a lo que trata este artículo. Lograr que una planta de lavanda crezca fuerte, saludable, con mucho perfume y lindas flores que hagan bonito nuestro jardín. Esto lo elaboro en base a muchas notas leídas, libros de botánica, pero en especial años de experiencia propia que se ven reflejado en algunas cosas que contaré a continuación.
Mientras, puedes revisar decena de otras recetas que tienen como ingrediente la lavanda, desde purificar la casa de malas energías, hasta hacer comidas con lavanda como estosmerengues de lavanda con chocolate y almendras, y más cosas interesantes.
Lo principal: un buen plantín de lavanda para comenzar
En Argentina, dentro de todos los viveros que recorrí durante años, es muy popular un solo tipo de lavanda. Esta, comparada con variedades que hay en Europa y la zona de Centro América, tiene algunas variaciones en sus hojas y sutil diferencia de su perfume, pero los fundamentos del cuidado son similares.
Los plantines o planta inicial, son aquellas que nos venden en los negocios especializados con un tamaño pequeño a mediano, en macetas que generalmente temporales o descartables. Estas plantas ya poseen raices y tienen un tiempo promedio de vida, es decir, luego de comprarlas debemos procurar transplantarlas al lugar definitivo pronto antes que se marchiten o enfermen.
Pero vamos a lo que trata este artículo. Lograr que una planta de lavanda crezca fuerte, saludable, con mucho perfume y lindas flores que hagan bonito nuestro jardín. Esto lo elaboro en base a muchas notas leídas, libros de botánica, pero en especial años de experiencia propia que se ven reflejado en algunas cosas que contaré a continuación.
Mientras, puedes revisar decena de otras recetas que tienen como ingrediente la lavanda, desde purificar la casa de malas energías, hasta hacer comidas con lavanda como estosmerengues de lavanda con chocolate y almendras, y más cosas interesantes.
Lo principal: un buen plantín de lavanda para comenzar
En Argentina, dentro de todos los viveros que recorrí durante años, es muy popular un solo tipo de lavanda. Esta, comparada con variedades que hay en Europa y la zona de Centro América, tiene algunas variaciones en sus hojas y sutil diferencia de su perfume, pero los fundamentos del cuidado son similares.
Los plantines o planta inicial, son aquellas que nos venden en los negocios especializados con un tamaño pequeño a mediano, en macetas que generalmente temporales o descartables. Estas plantas ya poseen raices y tienen un tiempo promedio de vida, es decir, luego de comprarlas debemos procurar transplantarlas al lugar definitivo pronto antes que se marchiten o enfermen.
Este lleva en tierra unos 20 días, es la última de mi jardín.
Generalmente en los viveros o comercios de botánica, tienen un riego permanente, por la mañana y noche, mínimo. Es por eso que debemos ir “acostumbrando” nuestra planta a un cambio. Yo suelo hacer la adaptación poniéndola en un lugar cercano a donde quedará finalmente plantada, regando por la mañana temprano y revisando por la noche la humedad restante, adicionando sólo si hiciera falta en épocas de mucho calor. Así al menos 2 días, luego si el transplante.
No saques las hojas secas, troncos, poda ni residuos ni nada del plantín. Mientras menos manipulación tenga en este tiempo más fácil será su transplante a tierra, producirá menor estrés e irritación a la planta.
Preparar el suelo para plantar la lavanda
El suelo que quiere la lavanda es semi arenoso. En climas templados (Argentina, Chile, Uruguay) andará bien con una mezcla aproximada de 3 partes de tierra y 1 de arena; en climas más cálidos (Perú, Bolivia, Brasil, Centro América, España, México) suele recomendarse más la proporción de 3 partes de tierra y 2 partes de arena gruesa y 1 parte de arena fina.
Si vas a plantar en tierra, diectamente al suelo, lo mejor es ablandar con pala un espacio de 50x50cm y 30cm de profundidad, allí realizar la mezcla. Primero debes revisar con la yema de tus dedos la textura y brillo: ahí identificarás en seco y a penas un poco de humedad, si tu tierra tiene ya de por sí algo de arena o arcilla en su composición natural. Ten en cuenta este rápido análisis para adaptar la mezcla. En cambio, si plantarás en una maceta, procura usar las cantidades aproximadas que mencioné más arriba.
Especialmente deberás extraer todas las ramas y piedras que haya en ese espacio, a demás de rompes terrones que hayan quedado. Así procederemos ahora, a fertilizar el terreno de transplante con alguna de las siguientes técnicas (solo deberás elegir una):
Residuos orgánicos: pon en la base del pozo algunos residuos crudos de fruta y verduraque te hayan quedado al preparar la comida, especialmente las cáscaras. Evita las semillas, ya que no queremos salgan plantas de otro tipo, y también procura no incluir sus jugos (preferentemente enjuagar las cáscaras previamente). También se puede incluir cáscara de huevo picada, la aplastas un poco con los dedos y la rompes en pequeños trocitos.
Preparados químicos: los hay de muchas clases y se venden en algunos negocios de jardinería o el área de plantas que hay en supermercados. Vienen algunos granulados o geles que se pueden colocar directamente en la base del pozo, otros en líquido que se deben preparar para hacer el primer riego. Deberás leer muy bien la instrucciones del envoltorio y tener mucho cuidado ya que algunos pueden ser tóxicos.
¿Cómo transplantar una planta de lavanda?
Si la tenés en plantin, simplemente romper o cortar la maceta en donde viene ya de su compra, apoyarla en el pozo realizado y buscar con la tierra extraída y la mezcla realizada que quede a una altura adecuada: ni muy profunda, ni muy por encima del nivel de suelo. Eso generalmente se mide observando el tallo o tronco, donde está la tierra que ya trae de antemano y a penas unos dos dedos más alta que eso.
Cubrir el hueco con la mezcla y sin aplastar, acomodar suavemente con los dedos espaciendo de forma pareja por todo donde fuera necesario. Si falta tierra, puedes usar la que había anteriormente allí, sin necesidad de mezclarla con más arena.
Recuerda dejar hecha “la taza”, esa forma que se da con una canaleta de algunos sentímetros de profundidad en rededor, para que pueda acumular el agua re diego y lluvia y amborverla adecuadamente. La regla que yo utilizo es: sobre el tronco y tallo de la planta, debe quedar un montículo de tierra que lo cubra y de firmeza, puedes presionarlo con tus manos para que compacte. Luego, unos 30 hasta los 50cm donde habíamos demarcado el terreno de transplante, una canaleta de no más de 5cm de profundidad, bien prolija y procurando la tierra quede suelta. Si nos sobró mezcla o tierra, hacer un reborde exterior a todo eso.
Así se ve un campo de lavanda de cultivo:
Hacer que crezca saludable, de buen perfume y quede bonita
En mi criterio y experiencia, la lavanda en plantín se puede plantar en cualquier época del año, tratando de evitar las heladas y el calor extremo, claro; pero eso no impedirá que podamos hacerlo siempre que le brindemos suficiente atención los primeros 15 días.
La primera semana regar por la noche tarde o a primera hora, suficiente agua para llenar la cazuela y sin mojar las hojas ni el tronco. Si es verano en zonas cálidas, se puede reforzar con un riego a media tarde, pero no tan abundante.
La segunda semana, regarar en menor cantidad, ir disminuyendo de a poco la frecuencia: día por medio, cada tres días y así.
La lavanda para que se desarrolle saludable y tenga aroma fuerte, buenas flores y un color vivo, es mejor regar sólo dos veces a la semana. En épocas de abundante sol y calor, si ves que se vuelve opaca (más de su color característico normal, que de por sí ya lo es), rociala suavemente con un poco de agua para que refresque y limpie su follaje, pero solo un poco, limitadamente. En invierno ni lo pienses, eso hará que con el frio se congelen sus hojas y muera.
En época de floración es bueno regarla con el agua donde hayas hervido dos huevos, al menos cada 15 días; igual que poner algunos clavos de hierro pequeños en la mexcla de tierra para que aporten estos minerales (calcio por los huevos y hierro por el óxido que se formará).
La lavanda es una planta que resiste muy bien las altas temperaturas, pero si vas viendo que marchita o pierde color, quizás necesite un poco de agua adicional, presta atención, en especial en épocas donde comienza la floración primaveral.
Remueve su tierra al comenzar el otoño, en los últimos calores de verano. Allí puedes adicionar un poco de mantillo o tierra negra de compost para dicionar nutrientes en la etapa invernal, sin olvidar que deberás adicionar también una porción de arena gruesa también.
Durante los fríos invernales debes reducir al máximo el riego, solo haciéndolo en caso de días cálidos que pueda haber y mucho sol. Solo riega con un vaso o dos de agua, sin que toque las hojas ni el tronco. Yo personalmente las riego una vez al mes.
Promediando el invierno, corta solo las hojas de más abajo que puedan estar marchitas o ya secas; igual que las flores que hayan quedado secas de la temporada anterior. No es recomendable darle forma como si fuera un arbusto, si aún así deseas podar más, procura hacerlo en la parte externa de la planta y no muy cerca de los troncos y ramas principales (las más gruesas). Durante el resto del año, mejor no tocarla, salvo alguna ramita o flor que querramos sacar para aromatizar, tendremos que elegirlas con cuidado.
Mímala, no la tengas sola en medio del jardín. Es una planta que necesita otras en rededor, ya que las avejas son una fuente de polinización muy importante, y si está sola, dificilmente atraiga muchas avejas como necesita. Esta polinización provee mayor floración y crecimiento, cosas de la biología.
Si vas a plantar varias lavanda, procura que tengas espacio suficiente entre ellas. La regla que uso yo y describen algunos manuales de botánica es, como mínimo, un espacio de 50 centímetros al rededor del tronco (por eso el espacio que removimos al comienzo tenía ese tamaño); es decir, entre tronco y tronco deberá haber 1 metro o más espacio.
¿Cómo se ve una de mis plantas de lavanda?
Esta es la primera plantada, se ve un poco descuidada porque estuve de exámenes todo el mes, y realmente no pude darle la atención necesaria más que el riego correspondiente por los extremos calores de mi ciudad. Pero, no luce tan mal, así debería de verse la tuya (o más bonita).
Hay que tener en cuenta que esta tiene las flores con tallo extendido al igual que algunos espacios vacios en su follaje, productos químicos que la utilizo regularmente para la preparación de perfumes, y así la voy adicionando de diferentes formas a que tenga mayor producción de aceites aromáticos concentrados. Es por eso, también, que luce así. Aquí tienes una receta para preparar aceite de lavanda casero y natural.
Esos son algunos de los comentarios, consejos y experiencia que tengo en años de cultivar lavanda yo mismo, donde aprendí de algunos viveristas, libros y revistas especializadas en el tema, perfeccionando la técnica y ampliando el conocimiento también logré hacer agua y perfume de lavanda. Quizás en una próxima publicación lo pueda explicar, es muy rico su aroma y podemos usarlo para aromatizar naturalmente ropa, nuestro cuerpo y ambientes.
Espero te haya servido y aceptaré tus comentarios aquí o en el facebook de TodosLosComo, donde trataré de responder algunas preguntas. Vamos, ¡animate!
Generalmente en los viveros o comercios de botánica, tienen un riego permanente, por la mañana y noche, mínimo. Es por eso que debemos ir “acostumbrando” nuestra planta a un cambio. Yo suelo hacer la adaptación poniéndola en un lugar cercano a donde quedará finalmente plantada, regando por la mañana temprano y revisando por la noche la humedad restante, adicionando sólo si hiciera falta en épocas de mucho calor. Así al menos 2 días, luego si el transplante.
No saques las hojas secas, troncos, poda ni residuos ni nada del plantín. Mientras menos manipulación tenga en este tiempo más fácil será su transplante a tierra, producirá menor estrés e irritación a la planta.
Preparar el suelo para plantar la lavanda
El suelo que quiere la lavanda es semi arenoso. En climas templados (Argentina, Chile, Uruguay) andará bien con una mezcla aproximada de 3 partes de tierra y 1 de arena; en climas más cálidos (Perú, Bolivia, Brasil, Centro América, España, México) suele recomendarse más la proporción de 3 partes de tierra y 2 partes de arena gruesa y 1 parte de arena fina.
Si vas a plantar en tierra, diectamente al suelo, lo mejor es ablandar con pala un espacio de 50x50cm y 30cm de profundidad, allí realizar la mezcla. Primero debes revisar con la yema de tus dedos la textura y brillo: ahí identificarás en seco y a penas un poco de humedad, si tu tierra tiene ya de por sí algo de arena o arcilla en su composición natural. Ten en cuenta este rápido análisis para adaptar la mezcla. En cambio, si plantarás en una maceta, procura usar las cantidades aproximadas que mencioné más arriba.
Especialmente deberás extraer todas las ramas y piedras que haya en ese espacio, a demás de rompes terrones que hayan quedado. Así procederemos ahora, a fertilizar el terreno de transplante con alguna de las siguientes técnicas (solo deberás elegir una):
Residuos orgánicos: pon en la base del pozo algunos residuos crudos de fruta y verduraque te hayan quedado al preparar la comida, especialmente las cáscaras. Evita las semillas, ya que no queremos salgan plantas de otro tipo, y también procura no incluir sus jugos (preferentemente enjuagar las cáscaras previamente). También se puede incluir cáscara de huevo picada, la aplastas un poco con los dedos y la rompes en pequeños trocitos.
Preparados químicos: los hay de muchas clases y se venden en algunos negocios de jardinería o el área de plantas que hay en supermercados. Vienen algunos granulados o geles que se pueden colocar directamente en la base del pozo, otros en líquido que se deben preparar para hacer el primer riego. Deberás leer muy bien la instrucciones del envoltorio y tener mucho cuidado ya que algunos pueden ser tóxicos.
¿Cómo transplantar una planta de lavanda?
Si la tenés en plantin, simplemente romper o cortar la maceta en donde viene ya de su compra, apoyarla en el pozo realizado y buscar con la tierra extraída y la mezcla realizada que quede a una altura adecuada: ni muy profunda, ni muy por encima del nivel de suelo. Eso generalmente se mide observando el tallo o tronco, donde está la tierra que ya trae de antemano y a penas unos dos dedos más alta que eso.
Cubrir el hueco con la mezcla y sin aplastar, acomodar suavemente con los dedos espaciendo de forma pareja por todo donde fuera necesario. Si falta tierra, puedes usar la que había anteriormente allí, sin necesidad de mezclarla con más arena.
Recuerda dejar hecha “la taza”, esa forma que se da con una canaleta de algunos sentímetros de profundidad en rededor, para que pueda acumular el agua re diego y lluvia y amborverla adecuadamente. La regla que yo utilizo es: sobre el tronco y tallo de la planta, debe quedar un montículo de tierra que lo cubra y de firmeza, puedes presionarlo con tus manos para que compacte. Luego, unos 30 hasta los 50cm donde habíamos demarcado el terreno de transplante, una canaleta de no más de 5cm de profundidad, bien prolija y procurando la tierra quede suelta. Si nos sobró mezcla o tierra, hacer un reborde exterior a todo eso.
Así se ve un campo de lavanda de cultivo:
Hacer que crezca saludable, de buen perfume y quede bonita
En mi criterio y experiencia, la lavanda en plantín se puede plantar en cualquier época del año, tratando de evitar las heladas y el calor extremo, claro; pero eso no impedirá que podamos hacerlo siempre que le brindemos suficiente atención los primeros 15 días.
La primera semana regar por la noche tarde o a primera hora, suficiente agua para llenar la cazuela y sin mojar las hojas ni el tronco. Si es verano en zonas cálidas, se puede reforzar con un riego a media tarde, pero no tan abundante.
La segunda semana, regarar en menor cantidad, ir disminuyendo de a poco la frecuencia: día por medio, cada tres días y así.
La lavanda para que se desarrolle saludable y tenga aroma fuerte, buenas flores y un color vivo, es mejor regar sólo dos veces a la semana. En épocas de abundante sol y calor, si ves que se vuelve opaca (más de su color característico normal, que de por sí ya lo es), rociala suavemente con un poco de agua para que refresque y limpie su follaje, pero solo un poco, limitadamente. En invierno ni lo pienses, eso hará que con el frio se congelen sus hojas y muera.
En época de floración es bueno regarla con el agua donde hayas hervido dos huevos, al menos cada 15 días; igual que poner algunos clavos de hierro pequeños en la mexcla de tierra para que aporten estos minerales (calcio por los huevos y hierro por el óxido que se formará).
La lavanda es una planta que resiste muy bien las altas temperaturas, pero si vas viendo que marchita o pierde color, quizás necesite un poco de agua adicional, presta atención, en especial en épocas donde comienza la floración primaveral.
Remueve su tierra al comenzar el otoño, en los últimos calores de verano. Allí puedes adicionar un poco de mantillo o tierra negra de compost para dicionar nutrientes en la etapa invernal, sin olvidar que deberás adicionar también una porción de arena gruesa también.
Durante los fríos invernales debes reducir al máximo el riego, solo haciéndolo en caso de días cálidos que pueda haber y mucho sol. Solo riega con un vaso o dos de agua, sin que toque las hojas ni el tronco. Yo personalmente las riego una vez al mes.
Promediando el invierno, corta solo las hojas de más abajo que puedan estar marchitas o ya secas; igual que las flores que hayan quedado secas de la temporada anterior. No es recomendable darle forma como si fuera un arbusto, si aún así deseas podar más, procura hacerlo en la parte externa de la planta y no muy cerca de los troncos y ramas principales (las más gruesas). Durante el resto del año, mejor no tocarla, salvo alguna ramita o flor que querramos sacar para aromatizar, tendremos que elegirlas con cuidado.
Mímala, no la tengas sola en medio del jardín. Es una planta que necesita otras en rededor, ya que las avejas son una fuente de polinización muy importante, y si está sola, dificilmente atraiga muchas avejas como necesita. Esta polinización provee mayor floración y crecimiento, cosas de la biología.
Si vas a plantar varias lavanda, procura que tengas espacio suficiente entre ellas. La regla que uso yo y describen algunos manuales de botánica es, como mínimo, un espacio de 50 centímetros al rededor del tronco (por eso el espacio que removimos al comienzo tenía ese tamaño); es decir, entre tronco y tronco deberá haber 1 metro o más espacio.
¿Cómo se ve una de mis plantas de lavanda?
Esta es la primera plantada, se ve un poco descuidada porque estuve de exámenes todo el mes, y realmente no pude darle la atención necesaria más que el riego correspondiente por los extremos calores de mi ciudad. Pero, no luce tan mal, así debería de verse la tuya (o más bonita).
Hay que tener en cuenta que esta tiene las flores con tallo extendido al igual que algunos espacios vacios en su follaje, productos químicos que la utilizo regularmente para la preparación de perfumes, y así la voy adicionando de diferentes formas a que tenga mayor producción de aceites aromáticos concentrados. Es por eso, también, que luce así. Aquí tienes una receta para preparar aceite de lavanda casero y natural.
Esos son algunos de los comentarios, consejos y experiencia que tengo en años de cultivar lavanda yo mismo, donde aprendí de algunos viveristas, libros y revistas especializadas en el tema, perfeccionando la técnica y ampliando el conocimiento también logré hacer agua y perfume de lavanda. Quizás en una próxima publicación lo pueda explicar, es muy rico su aroma y podemos usarlo para aromatizar naturalmente ropa, nuestro cuerpo y ambientes.
Espero te haya servido y aceptaré tus comentarios aquí o en el facebook de TodosLosComo, donde trataré de responder algunas preguntas. Vamos, ¡animate!
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